Sombras, ese reflejo oscuro de la calidad de nuestro ser, esa copia maltrecha que nos persigue silenciosa pero incansablemente en los momentos de luz y nos abandona, casi vilmente, en los de oscuridad para bailar una danza invisible con sus compañeras de la noche.
Así de contradictoria y escurridiza como se presenta, forma una parte indispensable de nuestro ser, somos nosotros sin ser nosotros, son luz sin ser luz, son vida sin ser vida.
Últimamente, la vida, de la mano de la casualidad, han roto la que era a mi parecer la linea que me dividía entre el ser sombra y ser human, y con el paso del tiempo, la espera y los desafortunados desencuentros, me siento cada vez mas sombra y menos persona, u na sombra extraña, todavia feliz y hecha en parte de luz, que es portada por una figura desconocida, oculta por lo pronto, pero que seguramente sera aun mas extraña que la que antes solía ser.
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